Por la tarde se adentraron entre los árboles para hacer un circuito de tirolina y puentes que iban de un sitio a otro vadeando un pequeño riachuelo.
También disfrutaron con las piragüas en el rio Jerte. Al día siguiente emprendieron una ruta por el entorno a través de robledales y también cerezos. Se bañaron en las frías aguas del jerte e incluso pudimos hacer un papel volado en uno de los puentes.
Tras todo ello regresaron a Almoharín el martes por la tarde tras una experiencia muy bonita y convivencia también con otros niños de otras localidades.
¡ Qué fría está el agua...! |
¡Qué bien lo hemos pasado! |